Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de enero, 2020

Joy y Lupe

  Se tambaleó al ponerse de pie y desparramó sobre la mesa los restos de comida, bollitos de papel de servilletas y cáscaras de maní. Meneó la cabeza como queriendo afirmar su torpeza y sonrió cómplice a los presentes, como si supieran de antemano cuales serían sus palabras. Nos conocemos , pensó y paseó la vista sobre algunas caras entrañablemente queridas. Las sonrisas se volvían carcajadas, aparecían algunas muecas y un que otro silbido lo animaban a hablar. De a poco se hizo silencio. - Hasta que desaparezca el Imperio –dijo y alzó la jarra de cerveza. - ¡Qué así sea! –celebró Max y agregó después de un brevísimo silencio- Qué todas sus tierras y malditas ciudades sean arrasadas hasta la última piedra. - ¡Y le echaremos sal! - Y la declararemos tierra maldita. - ¡Por siempre! –gritaron juntos haciendo chocar las jarras y salpicándose de cerveza. 2 - Joy… Joy despierta… Joy. - ¿Qué hora es? ¿Ya es la hora? - No, no. Tuve un sueño, algo raro… - ¿Qué co

Y ahora qué hacemos...

¿Y   ahora qué hacemos? ¿Vuelvo por el Duke y los pibes aunque me queden dos balas y pierda? ¿O   volvemos a juntar la tropa? La noche se volvió más negra que nunca. De pronto y sin aviso cayeron   los Tecas y pan – pan a rebotar los plomos por todos lados. Las viejas se metieron cagando en las casas y los pibes rajaron a esconderse. Quedamos rodeados y tiramos, tiramos. Prendimos   fuego a los tachos de basura y nos escondimos en el humo. Igual tiraron. Tiraron una y otra vez. Cuando cayeron los ratis el trabajo había terminado. Tres charcos de   sangre   y unos gritos al cielo. Corrimos para la avenida zigzagueando entre los pasillos y los autos. Miré a un lado y al otro cuando conté las bajas. ¿Los pibes y el Duke? Murmuré, con el poco aire que me quedaba.