La Puna es un desierto duro, con algunos cursos de agua en los veranos; en el resto del año esos regueros son rastros secos como estelas geológicas. (...) Los hombres de la Puna son viajeros sedentarios; sus desplazamientos, por lo general, son para vender o para comprar cosas a veces insignificantes. (...) Estas tierras lijadas por los vientos y la sal fueron, sin embargo, en los tórridos días y en las noches heladas, el escenario de paso de séquitos imperiales, de zaparrastrosas tropas guerreras, conquistadores extraviados y locos detrás de equívocas quimeras... ...
Bitácora de Carlos A. Ricciardelli // palabras/imágenes/arte -desde este lado del mundo.